El regreso de uno de los grupos de rap más importantes al norte de la península no defraudó a nadie. La sensacional actuación que brindaron Fer y Gonzalo envolvió a todo el público santanderino en una atmósfera llena de energía, diversión y, sobre todo, rap.
Algunos de sus temas más icónicos, tales como Hustlers, Cicatrices o Dispuestos a morir fueron especialmente jaleados por los fans y llegaron a convertirse en poco menos que himnos cantados de forma casi mística.
En la despedida, los artistas mostraron todo su agradecimiento a la ciudad por su entrega y prometió que tardarían poco en repetir lo que resultó ser, a todas luces, una velada inolvidable.